Entrenamos duro para atraparnos en un ritmo. Los grandes deportistas habitan ese ritmo. Chong girar es golpear y girar, así actuamos siempre. Nos hacemos expertos cuando instalamos un ritmo » chon girar va la tung» que integra las pinzas musculares al enfoque y a la respiración, al sonido nasal, sonido nasal que es el cauce por donde vocalizamos conectados al abdomen y torax y que es más intenso cuando un adicto aspira cocaína. Esa perfecta respiración amplia y profunda le conecta su ritmo tanto como antes lo hacía el más intenso de sus deportes. Hagamos que nuestro «chong girar» sea con -siente para no ser victimas del ritmo (adictos)